Hericium erinaceus – MELENA DE LEÓN. HONGO QUE CONECTA INTESTINO-CEREBRO
Hericium erinaceus - MELENA DE LEÓN
EL HONGO MEDICINAL QUE CONECTA EL EJE INTESTINO-CEREBRO
La Melena de león (Hericium erinaceus) o, simplemente Hericium, es un hongo medicinal ampliamente utilizado por sus beneficios en el organismo. También es conocido como ’ Yamabushitake’, ‘Hou Tou Gu’ (seta de cabeza de mono), ‘hongo erizo’ o ‘pom-pom-blanc’. Cabe destacar su atractivo visual por su imponente cuerpo fructífero globular con unas espinas blancas colgantes que dan la impresión de una cascada congelada o de una majestuosa melena de león (de ahí su curioso nombre popular).
APUNTES IMPRESCINDIBLES DEL HONGO HERICIUM
El Hericium contiene cientos de componentes bioactivos o biomoléculas activas como beta-glucanos, hericenonas, ergosterol (provitamina D2) o el GABA natural, que se estudian por su papel en la salud de la microbiota intestinal (relacionada con la conexión del eje intestino-cerebro) y en la neurogénesis. Actualmente goza de una creciente popularidad y es objeto de continua investigación científica en:
- Gastroenterología: salud gastrointestinal o digestiva
- Neurología-sistema nervioso: función neurocognitiva (memoria-funcionamiento del hipocampo, concentración y atención)
- Sistema inmunológico
El Hericium erinaceus es un hongo comestible muy conocido en la medicina tradicional china (MTC), en la medicina popular tradicional y en la cocina medicinal asiática. De hecho, la Melena del león se documentó por primera vez con una hermosa ilustración china durante la dinastía Ming en el siglo XVI. Desde una perspectiva histórica, la Melena de león se ha utilizado tradicionalmente para «fortificar el bazo, nutrir el intestino y combatir el cáncer». En la MTC, se dice que el hongo es «nutritivo para los cinco órganos internos (hígado, pulmón, bazo, corazón y riñón)». Además, se afirma que «favorece la buena digestión y el vigor general, y que trata las úlceras intestinales». Por último, se ha utilizado para el «insomnio, la debilidad y la hipodinamia» (disminución de la fuerza), que son síntomas característicos de la deficiencia de ‘Qi’ (fuerza vital) en la MTC.
PROPIEDADES, APLICACIONES Y USOS DE LA MELENA DE LEÓN
La investigación de sus propiedades beneficiosas se ha acelerado en los últimos veinte años, lo que convierte a la Melena de león en un hongo medicinal con gran potencial. Tradicionalmente, se ha utilizado en las prácticas holísticas. Los monjes budistas solían tomar una infusión de este hongo medicinal para ayudar a concentrarse durante la meditación, ya que le atribuían el poder de «despejar la mente y potenciar la cognición». Además, ha sido utilizado a lo largo de la historia en la medicina tradicional China (MTC) para «combatir problemas estomacales y en otros órganos del aparato digestivo» (Hiwatashi et al., 2010).
NUTRIENTES DESTACADOS DE HERICIUM
La Melena de león posee una serie de nutrientes, biomoléculas o compuestos activos entre los que destacan:
- BETA-GLUCANOS
- GABA
- VITAMINAS: Grupo B y D
- HERICENONAS: Estimulando la biosíntesis del Nerve Growth Factor (NGF)
- MINERALES:
- Zinc
- Hierro
- Selenio
- Calcio
- Fósforo
- Potasio
- ERGOTIONEÍNA
- ERINACINAS: I, Ey H
HÁBITAT Y DISTRIBUCIÓN
La Melena de león es un hongo que crece en árboles viejos o muertos (principalmente en bosques de hayas y de robles). Habita de forma natural en muchas regiones del mundo. Se encuentra ampliamente extendido en las zonas montañosas de los territorios de Asia, el hemisferio norte de América y en muchas partes de Europa, siendo especialmente abundante en el centro y el sur de Francia.
NOTAS MICOLÓGICAS
El Hericium erinaceus suele tener un cuerpo fructífero redondeado con espinas que salen todas del mismo punto y caen en cascada como una cabeza de fregona. De color blanco o amarillo-marrón pálido que se oscurece con la edad, el cuerpo del fruto está unido al sustrato por un estipe muy corto y ancho. Se trata de cuerpos fructíferos anuales, pero pueden repetirse en el mismo lugar de un árbol durante varios años.
Todo el cuerpo fructífero puede tener hasta 30 cm de diámetro, aunque lo más típico es de 15 a 20 cm. Las espinas de Hericium erinaceus tienen puntas puntiagudas y varían de 1 a 5 cm de largo.
Fuente: hifasdaterra.com